EL GOBIERNO VUELVE A VENDER A SUS TRABAJADORES
El anuncio del gobierno de admitir como improcedente, no nulo, el despido por causa del Covid-19 avecina la pérdida masiva de miles de puestos de empleo en España. Con esta concesión a la patronal el gobierno acaba de empujar al paro a miles de obreros que tan sólo recibirán una compensación miserable ya reducida por reformas laborales anteriores. El gran cambio es pasar de despidos con indemnizaciones de 20 días por año trabajado a 33 días por año trabajado, el neoliberal despido libre, que no gratuito.
La inminente ola de EREs encubiertos y despidos individuales se sumará a la larga lista de ERTEs, obreros no renovados, temporales despedidos, empleadas de hogar, falsos autónomos y personal en negro que a día de hoy colapsan el paro no contando muchos de ellos ni siquiera para las estadísticas por su situación irregular. Un desempleo en el que acumulan cientos de miles de solicitudes, haciendo más que probables los retrasos en el cobro de las pagas, con todo lo que ello implica para las familias obreras en estas circunstancias. Sin embargo el gobierno lo que permite es que las empresas dejen de pagar los salarios desde “el momento del hecho causante” es decir, el inicio del estado de alarma.
Estas no son las únicas medidas bochornosas anunciadas por Pedro Sánchez, los “permisos retribuidos recuperables” que significa que deberemos horas a la empresa, cargando en las espaldas de los trabajadores asumir más horas de trabajo cuando termine esta crisis. Muy preocupante es también la delegación total de los trámites del paro a la empresa en nombre de sus trabajadores, medidas para facilitar al servicio público, que prometen innumerables irregularidades.
Las ningunas medidas para sectores como las empleadas del hogar, para las que la única propuesta que se hace es un subsidio por desempleo de pobreza y que aún ni siquiera se ha aprobado, la falta de claridad sobre los sectores no primordiales que van a cerrar o la no retroactividad de la prohibición de terminar los contratos temporales durante la crisis y de aplicar despidos por causas objetivas también son tantos que se apunta la patronal gracias a la coalición reformista.
En un país desindustrializado y con el sector servicios paralizado, con una economía terciaria y dependiente de una Unión Europea que brilla por su ausencia, la acción del gobierno con el Real Decreto-Ley 9/2020 del día 27 de marzo significa permitir aún más a los empresarios lavarse las manos de la crisis actual, colocando los intereses de los trabajadores, la inmensa mayoría de la población, como la última prioridad del actual ejecutivo.
Por ello desde el sindicato FOL, conscientes de que los trabajadores sólo contamos con nuestra propia organización para defender nuestro puesto y nuestro futuro, seguiremos luchando con más fuerza que nunca contra los vendeobreros que nos gobiernan. Seguiremos aumentando nuestra acción sindical y nuestras herramientas de apoyo y asesoría a los trabajadores, actuando en cada conflicto como un único puño. Ahora que el Estado se coloca de nuevo al lado de la patronal, nosotros que apostamos por un sindicalismo combativo; sabremos estar junto a los trabajadores durante esta crisis y en los problemas que vengan tras ella.